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Sin disputar posiciones de privilegio a otras producciones como la ganadería, la apicultura se ha instalado en la Cuenca del Salado como una actividad que sobresale a la hora de pensar procesos de innovación, desarrollo local y agregado de valor en origen. Aún con desafíos como el avance de la agricultura, el sobrepastoreo de los campos, y las fumigaciones que inciden directamente sobre la disponibilidad de la oferta floral y ponen en jaque el desarrollo de las colmenas, el sector ha profundizado sus estrategias hacia una mayor difusión y visibilización de la actividad como herramienta de sostén de la biodiversidad, con su aporte a la polinización y al equilibrio de los ambientes, y su contribución en los procesos de desarrollo local.
El crecimiento en aspectos técnicos y productivos apunta a producir miel de calidad sin la utilización de antibióticos, con acaricidas habilitados, incorporando técnicas de manejo, y buscando la trazabilidad del producto desde el apiario hasta la góndola. Pero uno de los mayores impactos, sin embargo, se dá en lo organizacional.
La estrategia apícola de INTA - PROAPI en la EEA Cuenca del Salado
Promover la adopción del Sistema de Gestión de la Calidad, que incluye las buenas prácticas en los distintos eslabones de la cadena apícola, la inocuidad y la calidad de los productos.
Promover la diversificación como estrategia de valor agregado en origen favoreciendo el desarrollo de nuevos productos.
Desarrollar un programa de capacitación continua para apicultores y técnicos.
Fortalecer los modelos asociativos, nuevos y existentes, como grupos de Cambio Rural, Cooperativas y Clusters.
Promover la formación de redes locales y regionales, con instituciones educativas, empresas proveedoras de insumos, instituciones públicas, municipios y universidades, como estrategias alternativas para la asociación de productores, la innovación y el desarrollo de la actividad.
Promover la comunicación interna y externa para la visibilización y fortalecimiento de los procesos de desarrollo y la difusión de los logros y avances.
Empezar por el principio
La columna vertebral del trabajo apícola de INTA en la Cuenca es la producción de miel de calidad bajo protocolo. Para ello, se busca la implementación de sistemas que aseguren esa calidad mediante un fuerte componente de capacitación, empezando por el inicio mismo de las cosas: el apiario. Las Unidades Demostrativas Apícolas juegan un rol fundamental en la capacitación, internalización y aplicación del Sendero Tecnológico Para Miel de Calidad. La estrategia (ver cuadro aparte), incluye una fuerte promoción a la formación de grupos de productores y al trabajo asociado, a fin de perdurar en el tiempo, evolucionando a empresas jurídicamente constituidas, siempre vinculadas a INTA y otras instituciones para facilitar la resolución de problemas en el territorio.
Resultados
La Semana de la Miel, una iniciativa del Ministerio de Agroindustria de la Nación cuya finalidad es promover el consumo de miel, mostró la fuerte inserción de los apicultores en sus comunidades, y contribuyó, por ejemplo, a que en lugares como Chascomús, Magdalena y Punta Indio, se conociera el impacto económico directo en los respectivos distritos. Fue ocasión de encuentro directo del productor con el consumidor; ámbito de capacitaciones sobre salas de extracción, buenos hábitos alimenticios y manejo de la colmena en una muestra de la amplitud del trabajo desarrollado. De alguna forma, la Semana de la Miel resultó también una excelente excusa para mostrar el crecimiento organizacional del que hablábamos al inicio, con las interacciones de productores, grupos asociados, Municipios, Escuelas, Ministerio de Agroindustria de la Provincia, el Programa Nacional Apícola de INTA - PROAPI, entre otros actores.
Pero el resultado de esta estrategia enfocada en la apicultura como motorizadora de procesos de desarrollo local, va mucho más allá. La EEA Cuenca del Salado tiene en su área seis Unidades Demostrativas, doce grupos de Cambio Rural y como producto central, el Clúster Apícola de la Cuenca con unas 40 mil colmenas en producción aproximadamente; cinco cooperativas, tres asociaciones, diez municipios, empresas proveedoras de insumos, e instituciones educativas, incluyendo Universidades.